¿Vives esperando aquel día en el que te despertarás con la fuerza de voluntad suficiente para empezar a hacer aquello que tanto pospones por la famosa “falta de motivación”?
Antes de seguir leyendo este artículo necesito que tengas claro que:
- Soy Coach especializada en transición de carrera.
- No te daré fórmulas mágicas.
- No te enseñaré accesos rápidos.
Pero NO TE DESANIMES, hay ciertas cuestiones que podemos ajustar para que tu fuerza de voluntad sea más fuerte.
¿Preparada para coger el mando de tu vida?
CONCEPTOS CLAROS: MOTIVACIÓN Y FUERZA DE VOLUNTAD
Cuanto más motivado estás, más fácil es que tengas fuerza de voluntad, así que si
buscamos en el diccionario Oxford la definición de MOTIVACIÓN encontraremos lo
siguiente:
“Cosa que anima a una persona a actuar o realizar algo.”
Con todos mis respetos a las definiciones lingüísticas, eso no nos ayuda mucho, así
que vamos a poner “cara” a la palabra “cosa”:
¿Qué es la “cosa”? ¿Dónde está la “cosa”? ¿Por qué necesito la “cosa”?
- La cosa es tu objetivo. Sí, lo que viene a ser tu meta, vamos. El punto hacia donde te diriges.
- La cosa está en ti, en tus decisiones, en aquello con lo que sueñas cada día.
- Necesitas la cosa porque es ella la que te motivará.
Si te fijas en aquellas personas que tienen una fuerza de voluntad muy fuerte, verás que suelen ser personas que tienen muy claro dónde está su objetivo. Así es como la motivación surge de un modo casi automático, sin (tanto) esfuerzo.
Cuando el objetivo está claro y el camino bien planteado, es cuestión de ponerse en acción y coger ritmo.
Porque no existe la motivación por si sola como si de una característica se tratara, lo que sí existe es un objetivo por detrás de tus acciones, TU COSA.
¿Quieres un ejemplo claro?
Los deportistas de elite.
Estos deportistas entrenan entre 7 y 8 horas diarias durante años de su vida.
¿De verdad crees que es motivación sin más?
No.
Su fuerza de voluntad está ahí a diario, porque tienen claro cuáles son sus
OBJETIVOS, esta es su motivación.
Dicho eso quiero que tengas claro la siguiente premisa:
OBJETIVOS CLAROS = Motivación
Motivación = FUERZA DE VOLUNTAD
Y eso nos lleva a
OBJETIVOS CLAROS = FUERZA DE VOLUNTAD
¿ESTÁS SEGURO DE TUS OBJETIVOS?
Antes de explicar los hábitos que te está impidiendo de tener fuerza de voluntad.
Quiero asegurarme de que tengas claro uno de los detalles más importantes, el que te llevará al fracaso o al éxito:
¿TIENES CLAROS TUS OBJETIVOS?
De nada sirve plantearse un objetivo que no quieres lograr, y me preguntaras:
¿Por qué me plantearía un objetivo que en realidad no quiero?
Tengo que decirte que es mucho más habitual de lo que crees, ¿por qué ocurre eso?
Por dos factores:
- Presión sociocultural
- Creencias limitantes
PRESIÓN SOCIOCULTURAL
El ser humano tiende, por su naturaleza, a desear, a necesitar pertenecer a un grupo, se trata de un rasgo intrínseco en nuestra personalidad, heredado de nuestros antepasados, del cual nos cuesta desvincularnos.
Esa necesidad nos hace seguir un camino pautado por la sociedad en la cual vivimos, seguir el patrón, que puede ser más o menos el siguiente:
- Sacarse una carrera
- Tener pareja
- Encontrar un trabajo “estable”
- Casarse
- Hacerse una hipoteca
- Tener hijos
Si sigues este orden, nadie te dirá que no lo haces bien, la mayoría serán comentarios positivos (porque sí, aunque no lo pidas, la gente te comentará lo que piensa de tu vida).
Que los demás estén de acuerdo contigo te da una sensación muy poderosa, la de estar haciendo las cosas bien, de que tu vida prospera adecuadamente.
Aunque, afortunadamente, los patrones se rompen cada vez con más facilidad, siempre habrá tres tipos de personas:
Es el tercer grupo de personas el que más abunda:
¿Cuántas personas conoces que se quejan a diario de todo: de su trabajo, de sus horarios, de sus compromisos?
Un montón, ¿verdad?
Abundan las quejas y lo peor es que no se tratan de quejas puntuales, sino de situaciones cotidianas.
El mundo ha cambiado a una velocidad abrumadora, las posibilidades son enormes, tenemos acceso a mucho conocimiento des de nuestro sofá, vemos a diario personas viviendo de los más distintos modos debido a todas las posibilidades se nos presentan.
Nos puede parecer que hace mucho tiempo de eso, pero no, todavía estamos aprendiendo a navegar en aguas desconocidas, hay mucho que explorar y eso genera miedos e inseguridades.
SALIRSE DEL PATRÓN, PARA LA MAYORÍA, SIGNIFICA MUCHA PRESIÓN.
(Vale, lo sé, tenía que hablar de la formulación de objetivos que realmente queremos, ahora voy a eso.)
Nos encasillamos en el patrón sin mirar a los lados y muchas veces nos proponemos objetivos que no queremos por esta presión que nos llega a través de nuestros familiares, amigos, pareja, de la gente que tenemos cerca y eso nos impide soñar, nos frena y nos genera inseguridad, así es como nos planteamos metas en la vida que en realidad no son nuestras.
Para realmente:
- DESCUBRIR QUE DESEAS DE VERDAD EN TU VIDA,
- DECIDIR DONDE QUIERES ESTAR DENTRO DE UNOS AÑOS
Tienes, debes, desvincularte de estas ideas preconcebidas de un mundo que ya no existe, de un mundo que está cambiando a pasos agigantados.
Permítete por un momento imaginar tu vida sin patrones, deja fluir tus deseos, sin pensar en:
Que se espera de ti y que es lo correcto.
No quiero que esto parezca ahora un juego del mundo de yupi, pero hay que aproximar al máximo tus sueños a tu realidad, y, así, formular objetivos que realmente te hagan:
ENTRAR EN ACCIÓN
Si sueñas con jugar a fútbol, tienes 40 años y se te da mal, no iremos a ningún lado, pero, si sueñas con ser profesor y eres mecánico, lo podemos plantear y preparar un plan de acción para llegar a tu objetivo.
Si es lo que realmente quieres, tienes tu objetivo claro y un camino para seguir, no te preocupes, que la fuerza de voluntad estará ahí.
CREENCIAS LIMITANTES
Las creencias limitantes:
- Surgen de aquello que hemos escuchado desde niños;
- Son herencia de las personas que han convivido con nosotros durante nuestra fase de crecimiento, mientras formulábamos nuestras opiniones, nuestro modo de ver la vida.
De todo este conjunto de ideas que heredamos, están las creencias limitantes, el mejor ejemplo que os puedo dar y probablemente del que más se habla, es sobre el dinero.
Quien nunca ha escuchado frases como:
El dinero cambia a las personas.
El dinero trae problemas.
Si siempre has escuchado eso es muy posible que tus objetivos no sean relacionados con la prosperidad financiera, porque lo verás como algo malo.
También están aquellas creencias limitantes directamente relacionadas con tus capacidades:
- Siempre has sido mal estudiante.
- No se te dan bien los deportes.
- Eres malo hablando en público.
Como eso se te quedo grabado, probablemente tus objetivos nunca tendrán que ver con nada que requiera estos puntos, pensarás que no eres suficientemente bueno.
Y así va… la mayoría de las creencias limitantes son trabas en nuestro camino, hay que poder identificarlas y combatirlas, o bien, substituirlas por otras.
¿Qué tiene que ver eso con tus objetivos?
Pues todo.
Puede que quieras mucho algo, pero que dentro de ti haya una vocecita que te diga que no serás capaz, aunque esa voz no sea más que una creencia limitante, muy poco verdadera sobre quién eres o de lo que puedes llegar a ser.
Y ¿AHORA QUÉ?
¿Cómo sabemos si estamos siendo de verdad sinceros con nosotros mismos y estamos proyectando nuestras vidas en el camino correcto?
EMPECEMOS por mirar hacia dentro:
- ¿Cómo te sientes cuando te imaginas llegando a tu meta?
- Si la opinión de nadie importará, ¿este seguiría siendo tu objetivo?
- ¿Cómo quieres verte dentro de 10 años? ¿Eso encaja con tus objetivos actuales?
Contesta para ti, sé sincera, nadie te está escuchando.
Lo único que te hará levantar una y otra vez cuando te caigas es la seguridad de que lo que estás haciendo vale la pena, que, aunque cueste, lo haces porque la meta final es realmente increíble. Entiéndase increíble por aquello que uno desea, sea lo que sea.
Por eso, es tan importante que tu objetivo sea tuyo y lo desees con fuerza, si no la probabilidad de que te quedes a medio camino y de que te sientas frustrado es mucho más alta.
Ahora me dirás:
Vale Laura, lo tengo claro, mi objetivo es mío.
¿Cómo me explicas que aun así no tenga fuerza de voluntad suficiente para hacer lo que es necesario para llegar a donde quiero?
Te diré algo que ya sabes, todos somos seres biológicos, y, por ser así, hay aspectos que impactan directamente a nuestro cerebro, allí donde nace nuestra fuerza de voluntad.
Allá vamos.
El origen de tu fuerza de voluntad
El ser humano actúa en función de aquello que le dicta el cerebro, teniendo eso en cuenta entendemos rápidamente que nuestra FUERZA DE VOLUNTAD sale de ahí, de nuestro querido cerebro, de una parte pequeñita, llamada córtex prefrontal:
Está situada en esta parte rojita, detrás de nuestra frente.
Nuestro córtex prefrontal está conectado directamente a nuestro sistema límbico, relacionado con nuestro comportamiento emocional.
Nos te aburriré con más explicaciones anatómicas, pero el conocimiento siempre es bien venido (culturilla básica, le digo yo).
El córtex prefrontal es el responsable por hacer lo más difícil, decir NO, o mejor, decir SI a aquello que nos da más trabajo.”
Sopolsky, 2004
Para resumir, te diré que está relacionado con:
- Tener disciplina
- Definir metas a largo plazo.
- Renunciar a las recompensas inmediatas.
- Ser conscientes de las consecuencias de nuestras decisiones.
Te daré el mejor ejemplo para entender como de importante es nuestro córtex prefrontal.
En 1848, un joven llamado Phineas Gage tuvo un grave accidente laboral, una barra de metal le atravesó el cráneo, lo que hizo que perdiera varios centímetros cúbicos de su lóbulo frontal, donde se encuentra el córtex prefrontal.
Para la sorpresa de los médicos, Phineas sobrevivió y además recupero sus capacidades mentales. No obstante, su personalidad había cambiado, el informe de su médico lo describía del siguiente modo:
“Él se muestra inquieto, irreverente, impaciente con limitaciones o consejos cuando entran en conflicto con sus deseos, proyecta muchos planos de iniciativas futuras, pero los abandona en seguida.” Harlow, 1848
Phineas Gage es un ejemplo claro, cuando el hierro que le atravesó el cráneo daño su lóbulo frontal dejando su córtex prefrontal perjudicado, Phineas perdió su fuerza de voluntad, aunque su cerebro era capaz de hacer millares de planes, él no era capaz de ejecutarlos (no tenía la fuerza de voluntad suficiente).
¿Entiendes lo importante que es que nuestro córtex prefrontal esté bien para tener fuerza de voluntad?
AHORA SÍ
HA LLEGADO EL MOMENTO
Ya sabemos de dónde sale la famosa fuerza de voluntad y como eres consciente de eso hay alguna que otra cosita que puedes hacer para tener tu córtex prefrontal actuando a todo gas.
Los 5 hábitos que deberías cambiar para aumentar tu fuerza de voluntad
BEBIDA ALCOHÓLICA
El Alcohol actúa directamente en nuestro cerebro, por supuesto que el consumo exagerado es dañino, pero… cuando hablamos de su impacto en nuestra fuerza de voluntad el consumo esporádico también nos puede afectar.
De los efectos a corto plazo del alcohol, es decir, des del primer trago, lo que más se ve afectado son las áreas emocionales y comportamentales de nuestro cerebro:
- Agrava estados de ansiedad
No es un secreto para nadie que cuando estamos persiguiendo nuestros objetivos, la ansiedad se puede presentar en nuestras vidas y eso te complicará seguir trabajando en tus metas con la energía necesaria.
- Aumenta nuestra impulsividad.
Eso nos puede llevar a tomar decisiones en sentido contrario a nuestros objetivos, ya que, dificulta nuestra capacidad de decir no a aquello que sabemos que no nos conviene.
¿Por qué ocurre eso?
Como ya te dije, nuestra fuerza de voluntad depende directamente de nuestro cerebro y el alcohol afecta a las conexiones del córtex prefrontal (¿Te acuerdas? Allí donde vive nuestra fuerza de voluntad).
PRIVACIÓN DE SUEÑO
Mientras dormimos es cuando nuestro cerebro se regenera, si no lo hace correctamente nuestro córtex prefrontal se ve perjudicado, sus funciones pasan a estar más débiles.
De las innúmerasbles consecuencias relacionadas con nuestra fuerza de voluntad, yo destacaría:
- El aumento de la ansiedad.
- La disminución de la capacidad de atención y toma de acción.
Ya hemos visto en el punto anterior que la ansiedad es perjudicial para trabajar en nuestros objetivos, si además le sumamos la falta de capacidad de concentrarnos y actuar, definitivamente, el hecho de lograr tener resultados se complica.
DROGAS
Me gusta separar drogas de alcohol, porque nuestra percepción de una palabra y de la otra es diferente, pero actúan del mismo modo en nuestro cerebro.
Todas afectan a nuestro córtex prefrontal del mismo modo, aunque habrá las que lo hacen con mayor o menos intensidad, todas son perjudiciales en cuanto a tener fuerza de voluntad.
DISTRACCIÓN
La distracción puede variar en cada uno de nosotros, pero hay que tener claro que cuando estás trabajando para lograr un objetivo en concreto todo aquello que te quite el foco es una distracción que debes disminuir/eliminar.
Por ejemplo, si tienes que terminar algo muy importante, pero sabes que si empiezas a contestar correos o al WhatsApp no tendrás todo el tiempo que necesitas, silencia el móvil y no abras el correo durante el tiempo que necesites, prioriza tus objetivos.
FALTA DE ENTRENAR EL “YO QUIERO”
Que poco profundizamos en el “yo quiero” y más después de cierta edad, entramos en modo automático, tengo que hacer eso, debo hacer lo otro, ahora toca, … está bien. Pero ¿qué queremos, con qué soñamos?
Liberar un poco la mente de las obligaciones diarias y a los “debo” y darte un rato para soñar, con cosas más y menos posibles es fundamental en la búsqueda de lo que quieres lograr realmente, y, no solo eso, recuerda definir también aquello que no quieres.
Truco extra para aumentar tu fuerza de voluntad
La fuerza de voluntad es mayor por la mañana.
Estás lleno de energía, habrás descansado, te queda un día entero. Así que empieza por aquello que menos te gusta, porque tu fuerza de voluntad estará a tu lado, y luego, te sentirás tan bien, que hacer lo que menos te apetece por la mañana se convertirá en una adicción.
Resumiendo… define bien tus objetivos, asegúrate de buscar lo que realmente deseas para tu vida y no te descuides de tratar bien a tu córtex frontal, sí aquella parte donde vive tu fuerza de voluntad.
Si encuentras dificultades recuerda que aquí me tienes para ayudarte. El coaching se encarga de ayudarte en este tipo de procesos. Puedes solicitar una primera sesión donde ya te llevarás un trabajo personal importante asegurado.